Escribe los textos de tu web como si fueras copywriter

Escribe los textos de tu web como si fueras copywritter

¿Qué te vas a encontrar aquí?

Sigo con la idea de sacarle partido a las conexiones maravillosas que tiene esto de emprender. De ahí el último post y que hoy haya invitado a Ana Mayor, a mi blog.

Ella se define como periodista reconvertida en copywriter para negocios ecológicos, sostenibles y saludables.

Y hoy va a echarnos una mano con algo que a muchos se nos atasca: los textos de la web!

Lo se por experiencia propia y de clientes. A ver si esto te suena:

Estás decidida a hacer tu web, lo tienes todo: presupuesto, fotos, identidad corporativa…

Sabes cómo la vas a estructurar y qué quieres contar en cada una de las secciones. Peeeero a la hora de la verdad, escribir sobre uno mismo es un gran reto.

Los plazos que tenías previstos para lanzar tu web están cada vez más cerca y… hola frustración!.

Por suerte, Ana nos trae 7 pasos para evitar que la frustración y los plazos nos pillen al escribir los textos de nuestra web.

Así que, le cedo el teclado:

Escribe los textos de tu web como si fueras
copywriter

¿Cómo trabajo los textos de mi web si no soy copywriter? ¿Cómo organizo las ideas? ¿Qué tengo que contar? Seguro que te has hecho estas preguntas o parecidas cuando te has enfrentado a escribir los textos de tu página.

Situarte delante de una pantalla para hablar de tu propia empresa supone una cascada de sudores fríos. No hay nada más difícil que hablar de ti y de tu negocio. Te falta perspectiva y además, no quieres sonar como tu competencia.

Te traigo buenas noticias. Ser capaz de escribir el copy de una página es más fácil cuando conoces el proceso y entiendes la cadena de pasos que hay que dar hasta conseguir llenar tu web de textos con sentido y no con frases vacías. Gracias a la invitación de Uxía, hoy te traigo un sistema de 7 pasos con el que te resultará más fácil contar lo que haces al público que te necesita.

¿Me acompañas?

Coloca al cliente en el centro de tu contenido

Aunque parezca una contradicción, lo importante en tu web no eres tú sino tu clientela. Las webs que hablan de sí mismas y repiten clichés como «nuestro objetivo es la completa satisfacción del cliente y ofrecer un trato personalizado» han pasado (o deberían) a la historia. Primer truco: cambia el nosotros o el yo por el tú. Sal de ti y empieza a entablar el diálogo con quien te está leyendo.

Para eso tienes que indagar en quién es la persona que te compra, qué le preocupa, qué necesidad o aspiración tiene en su vida y por eso recurre a ti. Esto es lo que en copywriting se llaman puntos de dolor.

Y no vale hacer un retrato demográfico: mujer, 40 años, casada y con hijos… No. Hay que ir más allá. Ponle un nombre y traza su perfil sociográfico:

  • dónde vive
  • cuáles son sus hábitos diarios
  • qué pensamientos tiene relacionados con el producto o servicio que tú ofreces
  • qué oye en la calle o le comentan sus amigos sobre tu sector
  • qué le frena de comprar tu producto o servicio

Cuanto más ahondes en su psicología, más cerca estarás de comunicarte con esa persona y conseguir que te preste atención.

Define claramente tu propuesta de valor única

Otro elemento para desterrar: la frase «bienvenido a mi sitio web». Tienes pocos segundos para captar la atención del visitante, así que es mejor emplearlos en que sepa claramente lo que ofreces.

Esto, que técnicamente se llama propuesta de valor única, es lo que le hará quedarse o pasar página.

Para que la redactes fácilmente puedes elegir una de estas fórmulas:

  • Hago ______ (pon tu actividad) ______ para ______ (un tipo determinado de cliente) ______
    Por ejemplo: Meraki, branding consciente para marcas comprometidas.
  • Hago ______ (pon tu actividad) ______ de esta determinada manera.
    Por ejemplo: Ecosia, el buscador que planta árboles.
  • Hago ______ (pon tu actividad) de esta determinada manera ______ para ______ (un tipo determinado de cliente) ______ .
    Por ejemplo: Palabra de Araña, copywriting y redacción tejidos a mano para negocios ecológicos, sostenibles y saludables.

¿Dónde colocarlo?

Lo mejor es en el primer golpe de vista de la página de Inicio o junto al logo.

Lista las características y ventajas de tu producto o servicio

Empecemos por lo más objetivo: cómo es tu producto o servicio. Escribe en una lista sus características.

  • En el caso de un producto puedes describir su forma, tamaño, peso, color, número de unidades que incluye o material en el que está fabricado.
    A continuación, unes cada característica con una ventaja. Por ejemplo, si está realizado en un material reciclable o es biodegradable, la ventaja es que no genera residuos ni desechos. Esto lo puedes aplicar a cada característica.
  • En el caso de un servicio, las características pueden ser el tiempo de entrega, si tienes método de trabajo propio, si necesitas reunirte con el cliente o si puede darte la información que necesitas por medios digitales, cuántas versiones entregas de ese trabajo.
    Ahora convierte estas características en ventajas: la ventaja de trabajar bajo un calendario con fechas marcadas de entrega será que el cliente tendrá el trabajo a tiempo y en todo momento sabrá en qué parte del proceso se encuentra el trabajo.

¿Dónde colocarlo?
Suele ser más propio de la página de venta del Servicio o en la ficha de producto de una tienda online.

Describe los beneficios que ofrece

Más importante que las características y ventajas es conocer a fondo los beneficios que aporta lo que ofreces. De cómo lo cuentes dependerá que el cliente entienda por qué debe comprarte o contratarte.

Si seguimos con los ejemplos del punto anterior, ese material reciclable o biodegradable mejora la calidad de vida de las personas y del planeta.
Para una persona con esa sensibilidad es un punto importante, que valora y le hace decantarse por un producto u otro.

En el caso del servicio, saber cuándo te entregará el proveedor el proyecto ahorra tensiones e incertidumbre, por lo que el cliente se despreocupará y dormirá a pierna suelta.

¿Dónde colocarlo?

Los beneficios son la pimienta que adereza todos los textos. Deberás tenerlos presentes siempre que escribas e incluirlos en cada oportunidad que tengas. Son más evidentes y necesarios en la página de Inicio y en la de venta del producto o servicio.

Deja que otros cuenten lo bien que haces las cosas

La compra y, por tanto, el haberte ganado la confianza de tu cliente, no solo se produce por lo que tú dices de ti mismo sino por lo que los demás opinan de ti.

Seguro que tú también lees las opiniones en foros o consultas a tus conocidos sobre tal o cual producto o servicio que compraron.
Necesitamos ese aval social para acabar de decidir una compra.

Cuando escribas tus textos, incluye el testimonio de otros clientes que ya confiaron en ti. Pero no les preguntes qué opinan de ti, porque si quedaron satisfechos seguro que dicen que eres muy buena persona o
algo parecido. Mejor enfoca las preguntas hacia la transformación que experimentaron con tu trabajo o producto, qué consiguieron, cómo solucionaron su problema. Esto sí convence a otras personas porque, además de trabajar con buenas personas lo que queremos es solucionar nuestros problemas.

De modo que, saca teclado y Word y redacta 3 o 4 preguntas y envíaselas a tus clientes. Después pídeles permiso para publicar su testimonio con su nombre. De esta forma será más veraz que si colocas la frase sin autor.

Imagina que eres asistente virtual. Un ejemplo de testimonio convincente sería este:

Con _____ (escribe tu nombre)___ conseguí liberarme de una tarea que no me gustaba nada y dedicar ese tiempo a la parte donde soy verdaderamente necesaria en mi negocio. Ahora sé que esa parte rutinaria está atendida y mi foco está en crear valor.

¿Dónde colocarlo?
Los testimonios caben casi en cualquier sitio. Puedes repartirlos entre la página de Inicio, las de servicios o productos e incluso, si tienes muchos, crear una página específica de Testimonios.

Háblales sobre ti

Ahora sí. Toca mostrarte y hablar de ti, pero no para ser el centro de atención ni para contar tu historia desde que acabaste el instituto. Saber quién hay detrás de un negocio genera confianza. Demuéstrales que
pueden confiar en ti.

Lo que le importa a tu cliente es que le demuestres que le comprendes, le digas cómo le vas a ayudar y le cuentes qué experiencia tienes para ello.

En algunos casos, alguien emprende un negocio a partir de una experiencia propia o un problema que necesitaba solucionar. En este caso, tu historia sí es potente como para usarla y convencer de que
sabes de lo que hablas. Si la cuentas en clave de “te comprendo y yo he pasado antes por tu situación” es un buen relato para generar confianza.

Otra opción es hablar de los valores que te unen a ese negocio.

¿Dónde colocarlo?
Puedes redactar un texto para colocar en la página Sobre o Acerca de mí y extraer un pequeño resumen que puedes incluir en la de Inicio.

Guíales a dar el siguiente paso

Y por último, aunque es lo primero que debes pensar, es indicarles qué quieres que hagan después de leer tu página. Para eso reflexiona sobre el objetivo que tienes con esos textos y condúceles hasta él.

¿Quieres que te pidan un presupuesto, que contacten, que se suscriban a tu blog? Plantéalo desde el inicio y así redactarás los textos hasta guiarles a ese paso.

Por ejemplo, Uxía lo ha hecho muy bien en su Sobre mí. Al terminar, propone 3 caminos: descargar su guía, visitar el blog o trabajar con ella.

¿Dónde colocarlo?
Al pie de cada página puedes insertar una frase con un botón que les mueva a actuar.

Un extra para ti

Y si te alguno de estos puntos te ha resultado especialmente inspirador o útil, compártelo en los comentarios. Todos nos nutrimos de estas conversaciones en los blogs. ¿Aportas tu punto de vista?

Ey! ¿Te vas?

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6 comentarios en «Escribe los textos de tu web como si fueras copywriter»

  1. Me ha venido esta info como anillo la dedo ¡oigan! Muchas gracias por los tips tan bien explicados Ana y un placer conocerte 😉

    Responder
    • Genial Thania, de eso se trata, de compartir contenido útil.
      Ya estoy notando cómo los textos de tu nueva web fluyen ¿o será por el yoga? 🙂

      Responder
  2. Me ha encantado el post, gracias por la labor didáctica Ana y a ti por presentárnosla Uxía

    Responder
    • Doña despistada al teclado!
      Mil perdones por contestar 4 meses después. Gracias a ti por pasarte aquí y tomarte un ratito para leer y comentar Sheila. La idea es esa, generar contenido que sea útil 🙂

      Responder

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