Si estás leyendo esto, quizá intuyas que tener una imagen corporativa bien diseñada, puede ser un factor determinante en el éxito de cualquier negocio.
Lo que quizá no sepas es que antes de ponerte manos a la obra y empezar a diseñar tu imagen corporativa, es importante que tengas en cuenta una serie de factores clave que te ayudarán a crear una imagen coherente y efectiva.
Hoy te cuento qué hacer antes de diseñar tu imagen corporativa, cómo destacar entre la competencia y la importancia de crear un tablero de inspiración.
Define tu público objetivo o target
El primer paso para crear una imagen corporativa efectiva es conocer bien a tu público:
- ¿Quién es tu clientela potencial?
- ¿Qué necesidades tiene?
- ¿Cómo puede tu marca, tus productos o servicios a satisfacer esas necesidades?
- ¿Qué objeciones de compra puede tener?
- ¿Cuáles son sus marcas referentes?
- Obtener respuestas a estas preguntas te permitirá diseñar una imagen corporativa que hable directamente a tu público objetivo.
¿Has leído algún texto de una marca que te gusta y tenido la sensación de que te está leyendo la mente? Seguramente hayan hecho un análisis profundo y sepan cuáles son tus inquietudes y preocupaciones.
Obtener respuestas a estas preguntas te permitirá diseñar una imagen corporativa que hable directamente a tu público. Conectando de forma auténtica.
Analiza a la competencia
Antes de diseñar tu imagen corporativa, es importante analizar a tu competencia.
Ojo, sin obsesionarte. Observa detenidamente a otras marcas dentro de tu industria y estudia cómo se presentan tanto a nivel verbal como visual.
- ¿Cuál es el mensaje principal? ¿Y los secundarios?
- ¿Habla de tú a tú o de forma más genérica? ¿Con qué tono?
- ¿Cuáles son los elementos comunes en sus imágenes corporativas?
- ¿Qué colores, tipografías y estilos utilizan?
Este análisis te ayudará a identificar tendencias, comprender qué funciona y qué no en tu sector y, sobre todo, a encontrar huecos desocupados en el mercado y no ir a la rueda de tu competencia.
Destaca tus diferencias
Una vez que hayas analizado a tu competencia, es hora de destacar lo que te hace diferente. Identifica tus fortalezas y aquello que te distingue de las demás marcas.
- ¿Por qué creaste tu negocio?
- ¿Cuál es tu propuesta de valor?
- ¿Qué líneas rojas no estás dispuesta a cruzar?
- ¿Tienes un método de trabajo propio?
- ¿Cual es la razón principal por la que escoger tu propuesta y no otra similar?
Utiliza esta información para diseñar una imagen corporativa que resalte tus diferencias y te haga destacar en el mercado.
¿Cuál es tu territorio de marca?
El territorio de marca es una fuente de inspiración que nos permite materializar y comunicar la estrategia de marca de forma coherente.
Permite pasar de lo intangible a lo tangible. No sólo en el plano visual, si no también a la hora de generar contenidos o crear alianzas con otras marcas.
Es una herramienta que cunde mucho porque sirve de disparador de ideas pero también de filtro.
Define tu personalidad de marca
La imagen corporativa no solo se trata de logotipos y colores, también implica transmitir una personalidad.
- ¿Cómo quieres que tu marca sea percibida por tu público objetivo?
- ¿Buscas una imagen moderna y sofisticada, amigable y accesible, quizá algo más disruptivo?
Define la personalidad de tu marca y asegúrate de que todos los elementos de diseño reflejen esta identidad.
Crea un tablero de inspiración o moodboard
Este es un paso adicional que empecé a incluir a los pocos meses de empezar con el estudio.
Es muy útil para ver cómo se va a traducir la estrategia de marca definida en los pasos previos, al plano visual. Un tablero de inspiración es un recurso ideal cuando quieres poner en común ideas o para validar la coherencia visual de los elementos que van a conformar la marca.
Puedes utilizar herramientas en línea como Pinterest para recopilar imágenes, colores, tipografías y estilos visuales que te inspiren. Sin duda este tablero te ayudará a visualizar y consolidar tus ideas antes de traducirlas en tu imagen corporativa.
Te dejo un par de ejemplos de moodboard físico y digital:
Ahora sí. ¡Crea una identidad coherente!
Una vez que hayas definido tu público objetivo, analizado a la competencia, identificado tu diferenciación, escogido tu territorio, definido la personalidad de tu marca y creado un tablero de inspiración… es hora de crear una identidad visual coherente.
Esto incluye el diseño del logotipo, la elección de colores, tipografías, imágenes y cualquier otro elemento visual que utilizarás en tu comunicación corporativa. Asegúrate de que todos estos elementos sean coherentes y refuercen la estrategia definida.
En definitiva
Diseñar una imagen corporativa estratégica es esencial para que tu marca destaque en un mercado cada vez más saturado, pero antes de comenzar el proceso de diseño es importante tener en cuenta varios factores clave.
Desde definir tu público objetivo y analizar a la competencia, hasta crear un tablero de inspiración y establecer tu territorio y personalidad de marca. Cada paso es fundamental para crear una imagen coherente y efectiva que hable directamente a tu audiencia.
Espero que este artículo te haya resultado útil.